Bueno ahora que estoy de vacaciones oficialmente, voy a aprovechar para postear mas seguido. En La Búsqueda III mencione algunos amigos que conocí cuando estaba en 3ro de bachillerato. Y quede de contar la historia sobre la tecnología vegana. Así que esto es lo que pasó.
Estábamos en 3ro, al empezar el año recibimos 14 compañeros nuevos en el curso, entre los que se encontraban 4 veganos. Ellos eran: "El negro", "Jacobito", "Olivo" y "Mr.Dark". Ahh, y el "Capitaleño". Estos chicos se ganaron la simpatía de la mayoría de los demás compañeros pues todos eran (bueno son) bien chéveres.
En el curso los tenían como los riquitos de la vega, pues a ellos los traían todos los días en la Nave, así le decían al Chevroltet Capri Classic que conducía el papa de “Jacobito”.
Un día teníamos examen de Formación Humana, que en otras escuelas viene siendo la clase de religión. Esta clase no las impartía la “Profe’ Fina” que era bastante exigente con nosotros, nos ponía hacer un montón de cosas para ganarnos la nota, hasta teníamos que dibujar en el cuaderno y aprendernos un montón de cosas para los exámenes mensuales. En esos tiempos éramos pocos los que teníamos computadoras, cuando de repente se aparecen los veganos con tremendo material de apoyo o “chivo”, yo y creo que la mayoría no había visto algo así, eran unas letras chiquiticas pero de diferentes colores para poder distinguir las respuestas. Se repartieron los papelitos y le dan uno al Capitaleño.
Un día teníamos examen de Formación Humana, que en otras escuelas viene siendo la clase de religión. Esta clase no las impartía la “Profe’ Fina” que era bastante exigente con nosotros, nos ponía hacer un montón de cosas para ganarnos la nota, hasta teníamos que dibujar en el cuaderno y aprendernos un montón de cosas para los exámenes mensuales. En esos tiempos éramos pocos los que teníamos computadoras, cuando de repente se aparecen los veganos con tremendo material de apoyo o “chivo”, yo y creo que la mayoría no había visto algo así, eran unas letras chiquiticas pero de diferentes colores para poder distinguir las respuestas. Se repartieron los papelitos y le dan uno al Capitaleño.
Yo nunca he usado chivos, porque me matan los nervios, y los ya teníamos mas años en la escuela sabíamos que la “Profe’ Fina”, no era fácil. Así que seguimos estudiando para el examen. Pues llega la profe dice:
Termina de dictar y nos fajamos a llenar.

Cuando de repente se da cuenta que uno de los veganos tiene un chivo y dice:
“¡Anja! vegano y que hace usted con un chivo??
“Entréguenme su papel ustedes también!!
Al final del examen la profe le dijo que quería hablar con ellos, les dijo que pasaron por el salón de profesores a una ahora, los perdonó y les volvió a dar el examen a ellos 4 solos. Desde ese día se empezaron a fajar para cada examen de Formación.
Hasta el sol de hoy creo que puedo decir la “profe Fina” nunca se entero de que el Capitaleño estaba metido en el lío. Y hoy todavía todos recordamos y nos reímos del Fallo de la Tecnología Vegana.